Las frutas son uno de los tipos de alimento más delicado a la hora de la conservación y almacenaje.
Hay variedades de frutas que entran en putrefacción en poco tiempo. Contienen un porcentaje de agua alrededor de un 90 %, lo que hace que el ambiente de las dependencias de almacenamiento tengan una elevada humedad relativa. Estas proporcionan el medio más adecuado para el desarrollo de colonias de gérmenes, así como el favorecimiento de fermentaciones. Esta confluencia de circunstancias es la causa de olores desagradables, empeoramiento del aspecto y presentación de la fruta y lo que es más importante, después de vaciado el local es necesaria una completa desinfección, para eliminar los gérmenes y mohos de la partida anterior y evitar el contagio a la nueva.
El OZONO no solamente preserva a la fruta de la formación de mohos y colonias de bacterias, sino que mantiene los locales desinfectados, evitándose de esta manera las costosas desinfecciones que estos requieren entre dos remesas consecutivas.
El OZONO retrasa la maduración de un 20 a 30 %, lo que permite prolongar considerablemente el tiempo de almacenaje, se suprime la transmisión de sabores y olores, lo que permite un almacenamiento simultáneo, en una misma cámara, frutas de naturaleza diferente.
Por su acción desodorizante, el OZONO destruye los gases etilénicos, que producen la mayor parte de las especies (los cítricos son buen ejemplo de este hecho), impidiendo que se transmitan sabores de unas especies a otras.
Agua de lavado de ensaladas pre-cortadas, frutas y verduras
La utilización de ozono en el lavado de ensaladas y verduras nos permite obtener un agua con un grado de pureza inalcanzable por otros métodos. Su poder de desinfección y la ausencia total de productos químicos en el producto hacen de este sistema la elección ideal para este tipo de procesos.
Con residuales de ozono de 2 ppm en el agua de lavado se pueden obtener reducciones de contaminación en superficie superiores al 90%, que son iguales o mejores que las conseguidas con niveles de cloro de 50 ppm.
La otra ventaja es que posterior al lavado, el agua usada no queda contaminada, ayudando a que los vertidos al alcantarillado no lleven productos no permitidos. El producto no tiene alteraciones en el color, calidad y textura, aumentando en ocasiones la vida media del mismo.
El ozono es muy eficaz contra los microorganismos de las frutas y verduras, en especial contra los E. Coli y contra los mohos y levaduras. Actúa de forma eficaz contra la Ralstonia Solanacearum que puede producir . grandes pérdidas en el sector de la patata, tomate y tabaco.
El ozono juega un papel importante en estos procesos, pues a diferencia de otros sistemas, no deja residuales químicos sobre el producto ni en el agua de lavado.